domingo, 24 de octubre de 2010

Mágico Altiplano

DSC_0296 A las ocho de la mañana fue la hora de encuentro con mis nuevos compañeros, una pareja de españoles madrileños, mis antiguos compañeros Marc e Indira ya se habían ido pero siguiendo la misma dirección. Empieza una nueva aventura, ya termino los caminos de tierra y el tan añorado asfalto, esta bajo nuestra rueda, la ruta comienza con un buen descenso, las conversaciones son pocas, apenas DSC_0007empezamos a conocernos. Ya en una parte del descenso tuve que romper el hielo, tenía una emergencia número 5 (baño urgente), por lo que les pedí que me vieran la bici mientras yo me lanzaba corriendo por un barranco buscando el lugar para dar del cuerpo. Después de unos 55 km termina el descenso y empieza el ascenso pero DSC_0011con una pendiente bastante suave, tenia 12 días en Cusco sin montar en la bici, las piernas empiezan a sentir la pesadez de la bici junto con la subida pero los ánimos están cada vez más grandes, ya estaba ansioso por llegar al Titicaca unos de mis objetivos específicos del viaje. Luego de rodar unos 80 km decidimos descansar mis compañeros Álvaro y Alicia; y yo ya estábamos un poco cansados. Nos paramos en un DSC_0067pueblo llamado Cusipata donde fuimos al colegio a buscar hospedaje pero nadie nos supo dar razón del director, según estaba de viaje, y llegaba a las 5 pm, así que decidimos esperar un rato, luego de media hora decidimos ir al siguiente pueblo ya que aun era de día y luego de unos 5 km llegamos al peaje Saylla, donde nos facilitaron un lugar donde poner las carpas y pasar la noche. Para cenar me comí un arroz con pollo en lata que me había traído Eloy de Venezuela, y que mejor para dormir que después de una buena comida venezolana (aunque sea enlatada).

En la mañana siguiente después de un medio buen desayuno seguimos subiendo pero igual que antes con una pendiente bastante suave, tan suave que no se notaba DSC_0043visualmente pero después de unos cuantos kilómetros las piernas ya perdían fuerzas, el camino realmente espectacular desde que salimos de Cusco no habíamos bajado de los 3000 m.s.n.m. La vegetación de alta montaña predominaba, el frio era algo doloroso y el sol se hacía sentir en la piel. Ya hablábamos un poco mas y contando cada quien sus historias del viaje. Álvaro y Alicia están recorriendo parte del globo terráqueo, ellos venian de recorrer AlaskDSC_0047a y Canadá, luego volaron a Lima para llegar hasta Santiago de Chile y de allí volar hasta la India para hacer parte de Europa hasta volver a España. Después de unos 80 km el frio es cada vez mayor, ya nos acercamos a los 4000 metros de altura, llegamos a un pueblo llamado Llallahui donde pensábamos comprar algo de comer para pasar la noche, pero alguien del pueblo nos comentó que en Aguas Calientes, donde pensábamos quedarnos, se encontraba varias tiendas donde podíamos abastecernos,DSC_0055 y como siempre fue mentira, Aguas Calientes era un simple balneario de aguas termales. A lo que fuimos a preguntar si nos podíamos quedar a dormir allí, y por lo que tuvimos que pagar unos 1,5 soles (1 dólar = 2.8 soles), y para mi sorpresa cuando estoy entrando veo a par de chicos saludándome desde lejos y cuando logro afinar la vista me doy cuenta que son Marc e Indira, y bueno ya no éramos 3 cicloviajeros sino cinco. Logramos acomodarnos en una de las pozas de aguas termales y a hablar de todas las anécdotas que habíamos pasado. Para dormir nos acomodamos en un cuarto donde pudimos resguardarnos del frio, nos encontrábamos a unos 3950 metros de altura.

Muy temprano de la mañana ya nos estaban botando del lugar que DSC_0058 estaba por abrir, así que muy rápidamente nos acomodamos, desayunamos algo rápido y salimos a pedalear, en esta ocasión éramos 5 almas libres en la ruta con diferentes objetivos pero un mismo medio, la bicicleta, en busca de un yo no sé qué. Por primera vez pedaleo con tanto frio, seguíamos subiendo un poco más inclinado pero no mucho luego de unas pocas horas estábamos en el Abra La Raya el DSC_0072 punto más alto de este tramo a unos 4375 metros sobre el nivel del mar. De este punto empieza el altiplano peruano, un lugar realmente mágico la sensación es inexplicable, es un valle hermoso, donde la simpleza abunda. Cinco ciclistas a más de 3500 metros bajando hacia el sur con ganas de conocer, de aprender y enseñar. Luego de un poco mas de 100 km llegamos a Pucará donde nos dejaron dormir en la municipalidad con la condición de que muy temprano saliéramos de ahí. Nos preparamos una pasta con salsa y luego a dormir después de tan larga y agradable cicleada.

Después de arreglar todo y comer unos huevos fritos con pan salimos rumbo a Puno, igual de fría laDSC_0074 (2) mañana pero esta vez con más abrigo. El paisaje cada vez más impresionante, muchas yamas y alpacas, todo plano y frio muchas montañas a nuestro alrededor. Luego de varias horas de pedaleada empieza a nevar, waoo, esto es algo realmente nuevo para mí, otra sensación imposible de explicar con palabras, fue algo soñado hecho realidad. Los hombres adelante, como DSC_0074 siempre demostrando el poder sobre el pedal y las mujeres atrás mas hablando que pedaleando (jejeje es broma), así logramos llegar a Juliaca una cuidad del altiplano que rompe toda la armonía con la naturaleza que veníamos viendo. Una ciudad comercial llena de basura por todos lados y con mucho movimiento, mucho carros, moto taxi y bici taxi. Aquí nos detuvimos a comer y hablar un rato siempre pendiente de las bicicletas, ya nos habían avisado que no era muy segura esta zona. Luego de unos kilómetros ocurre lo que nunca deseamos una llanta pichada y lo peor de todo que fue la mía. DSC_0084 Marc como siempre regañándome por las malas condiciones tanto de mis cauchos como de mis tubos (tripas, cámaras). Me prestaron un caucho nuevo que tenia de recambio y botaron el que estaba usando, y de verdad me dio mucha nostalgia por mi caucho y esta era la segunda vez que él (Marc) me hacia botar mis cauchos que con tanto esfuerzo traía desde Venezuela. Luego de aproximadamente 100 kilómetros logramos ver con lo que tanto espere, El Titicaca y más de lo que esperaba, a pesar del granizo, viento DSC_0097frontal y de lado me sentía con mucha fuerza, era un espectáculo poder ver este lago, uno de los más famoso y altos del mundo. Por fin llegamos a Puno una ciudad más tranquila y mas organizada y a orillas de Lago Titicaca. Ya un poco tarde nos dirigimos a los bomberos y no tuvimos suerte esta vez, pero si en el Instituto de deporte de Puno donde nos dejaron pasar la noche algo fría.

Decidimos descansar un día y salir el siguiente, no tan DSC_0160temprano por la mañana salimos a ver el Lago y recorrer un poco la cuidad. Mucho turismo para ir a las islas del Titicaca, entre una de ellas Isla Los Uros, las cuales son unas islas flotantes hechas de totora, una especie de paja que se da por estos lados. La historias de estas islas la encontraras aquí http://es.wikipedia.org/wiki/Uru_%28etnia%29. DSC_0158 Para pasar la siguiente noche llame a un couch (pagina web de intercambio de alojamiento) que ya había contactado, pero solo le había dicho de mi persona, así que lo llame y le conté la historia que estaba con cuatro personas más y que si había espacio para todos y afortunadamente nos abrió la puerta de su casa. DSC_0169 Lizandro nos recibió muy amablemente y nos contó un poco de la historia de su cultura, y de cómo fue manipulada. El plan para el día siguiente era el de ir a la Isla de los Uros y al regresar seguir con la rodada.

DSC_0218 Después de descansar y salir a desayunar algo nos embarcamos en una lancha para ir a la isla por unos 13 soles y fue muy impresionante ver cómo viven y/o como vivió esta gente, ya que las islas son mas turísticas en la actualidad de lo que fueron en el tiempo de los Inca. ADSC_0233penas uno se baja en algunas de las islas los nativos sacan toda la artesanía y se ponen a trabajar y algunos te piden algo para que le tomes fotos. Luego de una gran sesión de fotos sin tener que pagar nos llevaron a otra isla en unDSC_0301 barco de la zona también hecho de totora. Esta isla era la capital, mucho más grande con restaurantes y una especie de hoteles, hasta escuelas tienen en estas islas. Luego de una gran aventura en Uros regresamos a Puno ya pasado el medio día, por lo que ninguno de nosotros tenía ganas de pedalear así que nos quedamos una noche más.

DSC_0089 Ya listos seguimos nuestro camino, con frio y un poco de tráfico. La ruta seguía al lado del lago, lo que me hacia pedalear viendo hacia un lado disfrutando de la hermosa vista y pensando un montón, cada metro el viaje cobraba un poco mas de sentido y bastante agradecido DSC_0098 conmigo mismo por haberlo emprendido, esos días fueron de gran emoción y mucho aprendizaje. Después de un poco de granizo y rodar unos 70 km llegamos a Juli, donde nos quedamos en la casa parroquial en un ambiente donde se imparten algún tipo de charlas. Pero para podernos quedar acá tuvimos que esperar que el párroco llegara y mientras eso nos colamos en un matrimonio, y bueno que cantidad de cerveza había, y por lo tanto todo el mundo estaba borracho, la verdad esto me decepciono un poco. DSC_0422Al llegar el párroco y diera su aprobación Marc, Álvaro y yo nos quedamos hablando como hasta media noche, convenciéndome de que dejara un montón de cosas que no necesito jejeje. En fin nos acostamos para al día siguiente llegar a Bolivia y terminar con otro país más.

DSC_0114Después de filtrar un poco de agua y acomodar todas mis cosas salimos con rumbo Copacabana, el camino muy fácil y con poco por recorrer por lo que no me esforcé mucho por ir rápido, así que me relaje y fui disfrutando mucho del paisaje y realmente que lo disfrute. La ruta fue siempre al borde del Titicaca, lo que hizo que fuera un día mágico, nos parábamos en ocasiones a disfrutar el paisaje por horas y hablar de cualquier cosa, estaba muy feliz de estarDSC_0119 cicleando por estos lugares. Luego de rodar unos 53 km llegamos a Yunguyo, ultimo pueblo que visitaríamos en esta ocasión de Perú. Sellamos pasaportes, con 30 días de permiso para estar en el país y opción a tener 30 más de manera gratuita en cualquiera oficina de migración. Y listo ya estábamos en Bolivia, todos contentos de haber cumplido con otro objetivo y emocionados por llegar a Copacabana de cual tanto nos habían hablado. Once kilómetros DSC_0136 más y ya habíamos llegado, buscamos hospedaje ya que lo merecíamos, para descansar y disfrutar de nuestro nuevo país, en Copacabana pasamos dos noches paseando y comiendo. En un café nos encontramos a otro cicloviajero el cual se uniría al grupo por lo que seremos ahora 6 viajando.

DSC_0166 La mañana siguiente muy temprano arreglando todo me entere que Marc e Indira se quedarían un día más, así que me fui con Álvaro y Alicia al mercado a desayunar y comenzar a pedalear con rumbo a La Paz pero sabíamos que no llegaríamos ese día. Llegamos a Tiquina donde esperaríamos que saliera una balsa para que nos cruzara hacia el otro lado del lago, luego de aproximadamente una hora llegó un carro y justamente apareció Dylan el chico Norte Americano que nos encontramos en Copacabana y que duro este chico, su bicicleta solo tiene una relación de engranaje y con muy poco equipaje, DSC_0221todo lo contrario a como yo viajo y por unos 5 bolivianos por persona logramos pasar (1 dólar = 7 bolivianos). Ya del otro lado del Titicaca seguimos la rueda hasta que llegamos a una población llamada Huarina, que pueblo tan tranquilo, no se escuchaba ningún tipo de bulla ni carro, un lugar perfecto para mí. Nos acercamos DSC_0355a la Alcaldía a pedir ayuda y aunque buscaron las maneras no tuvimos suerte, fuimos a la escuela la cual estaba abierta pero nadie a quien preguntarle y por ultimo fuimos a la casa parroquial que sin ningún problema nos abrieron las puertas y hasta cama nos dieron.

DSC_0377 Ya sabía que este día llegaría a La Paz por lo que ya estaba un poco estresado, es una capital y siempre es algo difícil entrar en bici. Mucho más temprano que los días anteriores salimos y como nunca a unos 20 km de haber rodado me tuve que parar a calentar mis manos, a pesar de que tenia guantes largos las manos se me congelaban DSC_0388 hasta tal punto que era un dolor que no soportaba, luego de un rato logre abrir el bolso y saque unos guantes adicionales que tengo para frio (no de bicicleta) y así pude seguir la ruta. Luego nos paramos a comer y hablar un rato en un pueblo muy cerca del Alto, ya se notaba la cercanía a la ciudad, mucho tráfico, la gente un poco mas apurada de lo normal y mi nivel de estrés cada vez aumentaba. Luego de rodar un poco masDSC_0396 llegamos al Alto, muchos colectivos que se atravesaban, pitaban, y literalmente rodando entre ellos logramos llegar a la autopista que nos llevaría hasta La Paz y lo bueno que todo el camino seria en bajada hasta unos 3600 metros de altura. Luego de rodar unos 70 km nos encontrábamos en la capital de Bolivia sanos y salvo.

DSC_0413 Mi próximo destino es el Salar de Uyuni (Salar de Tunupa) y las Lagunas al sur oeste de Bolivia, una ruta muy dura por el hecho de ser una carretera poco pedaleable, a mucha altura y con muy pocos pueblos donde abastecerse de agua y comida, por lo que me obligará a cargar con comida y agua para varios días lo que aumentará el peso de mi bici considerablemente, pero no estoy asustado todo lo DSC_0454 contrario emocionado por ver las hermosuras de la naturaleza. Hasta pronto amigo y gracias por seguirme a través de mi blog. A mi gente en Cumaná no dejen que se efectué la corrida de toros, mantengan su posición ya es hora de parar de lastimar a los que menos nos hacen daño.

2 comentarios:

  1. Hey, Juanjo! Qué bueno cómo siguió el recorrido! Me imagino lo que debe ser pedalear al lado del titicaca, es fantástico ese lago... Y lo que te espera ahora, el salar!!

    Mucha suerte, y seguí posteando! Ah, me gustaría ver las fotos que sacaste en Los huros, las subís a otro lado?

    Saludos!!

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  2. gracias por compartir tus vivencias y mas an para los que estamos programando un recorrido por suramerica nos sirve muchisimo talves me puedas sugerir como minimizar costos. att sergio marin h medellin colombia

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